miércoles, 17 de junio de 2015

Compartiendo la dignidad e identidad de los refugiados palestinos desde la danza: El Lajee Dabke Troupe en España y la acción del Lajee Center en el Campo de Refugiados de Aida





Por supuesto que se puede mantener la dignidad y la capacidad de reivindicación y lucha de un pueblo oprimido como el palestino a través de actividades que muestren su cultura y raíces identitarias. La visita del grupo palestino Lajee Dabke Troupe,  establecido en el campo de refugiados de Aida en la ciudad de Belén y creado alrededor de las actividades del Centro Cultural Lajee del mismo campo, no solo nos invita a disfrutar a través del baile de esas raíces culturales, sino también a conocer las actividades y la forma en que una nueva generación de palestinos refugiados intentan superar el discurso de la marginalidad y pobreza de los campos y enfrentan la ocupación desde la reivindicación de sus raíces y la mejora de sus condiciones de vida.

El grupo Lajee Dabke Troupe está de gira por España durante los meses de junio y julio. A su estancia inicial en Madrid le seguirán actuaciones en San Sebastián, Pamplona, Barcelona, Valencia, Málaga, Sevilla y Córdoba, en donde además de las actuaciones se desarrollaran de forma paralela diferentes actividades como debates y muestras fotográficas que expliquen más a fondo la realidad de los campos de refugiados palestinos, en especial el de Aida. (Más información sobre la Gira del Lajee Dabke Troupe en este enlace de facebook).











(Fotos realizadas por Agustín Millán, Paco, Mariangela y otros asistentes a la actuación del 16 de junio en Madrid)

Hablando del campo de Aida, podemos observar como es objeto de constantes incursiones y ataques por parte del ejército israelí, tanto a la luz del día como en la noche, siendo algunos de los miembros de la Troupe danzarina palestina heridos y arrestados por las fuerzas de ocupación.



De los ataques no se salva el Centro Lajee, ni el jardín de juegos que alberga. La cercanía del muro y las posiciones israelíes hacen del Centro y los niños que juegan en el parque objeto de ataques con gases lacrimógenos. Sin embargo, la dignidad y la capacidad de resistencia es algo que se aprende desde edad temprana como se puede ver en este video de febrero de este año.



Pero frente a un discurso, ya fuera proveniente del exterior o del propio interior de Palestina, que impone la necesidad de que los campos de refugiados sean lugares de privación y marginalidad como ejemplo de la opresión israelí y como medio para reclamar el derecho al retorno, las nuevas generaciones de refugiados Palestinos tratan de enfrentar ese discurso de marginalidad a través de la acción en los campos.

De este modo, la mejora de las condiciones de vida de los campos y el refuerzo identitario que suponen las actividades culturales, permiten discutir la narrativa de la marginalidad como premisa para defender el derecho al retorno; al contrario, contra mejores y más dignas sean las condiciones de vida en los campos y por ende mayor capacidad tengan los refugiados palestinos de defender su cultura, identidad e historia, en mejores condiciones, sociales, económicas, políticas y culturales estarán las nuevas generaciones de refugiados palestinos de defender el derecho al retorno a unas tierras que una vez les fueron usurpadas.

Un ejemplo que nos explica más a fondo esa nueva visión y capacidad de empuje de las nuevas generaciones de refugiados palestinos, lo podemos encontrar en el trabajo de la unidad y el programa medioambiental del Centro Lajee. Frente a la escasez, los cortes y la mala calidad del agua, desde este grupo se están llevando a cabo iniciativas de concienciación y monitoreo de la calidad del agua en el campo, donde jóvenes voluntarios se dedican a dar a conocer y hacer pruebas en el agua que llega a los hogares del campo, en especial en relación a la bacteria Escherichia coli (E. coli) causante de una gran variedad de enfermedades gastroinstestinales, además de otras bacterias coliformes.

Del mismo modo, y con más de 15 jóvenes voluntarios, la unidad medioambiental de Lajee propone incrementar la concienciación y la responsabilidad sobre asuntos medioambientales entre la población del campo, promueve la protección del medio natural del Palestina, desarrolla actividades en materia de reciclaje, o trabaja en la mejora de la seguridad alimentaria de la población del campo a través de un programa de cultivo en azoteas a través de la instalación de invernaderos en las mismas.

Con respecto a este último programa, por el momento ya se han instalado 5 invernaderos en diversas azoteas del campo, y pretende dar servicio a más de 200 residentes del campo (unas 30 familias), con la idea de ampliar su número conforme se vaya observando el éxito de la iniciativa.








Terminamos como empezamos, han venido a España para explicarnos parte de su cultura e identidad a traves de la danza, pero también para darnos a conocer cuál es su situación y la capacidad y el animo que tienen para enfrentar la ocupación desde la dignidad y la disposición para salir adelante. Las carcasas de los gases lacrimógenos ahora sirven como deposito de semillas y tierra.


Para conocer mas sobre el Centro Lajee se puede acceder a traves de su pagina web http://www.lajee.org/ donde se puede conocer mas sobre sus diferentes actividades y programas.

miércoles, 10 de junio de 2015

LA ACCION CLIMATICA COMO MECANISMO PARA FACILITAR LOS PACTOS POLITICOS EN LOS AYUNTAMIENTOS TRAS LAS ELECCIONES

Publicado en El Bercial y en el Periódico de Castilla la Mancha


Con cierto optimismo se quiere observar una creciente importancia de las políticas de sostenibilidad y de lucha contra el cambio climático en el debate político, durante la reciente campaña electoral municipal. No obstante, una visión más realista nos llevaría igualmente a reconocer, el todavía largo camino que queda para hacer de estas políticas un pilar fundamental en la acción municipal durante los próximos años.

Con el nuevo escenario político surgido tras el 24 de mayo, la necesidad de pactos entre diversas formaciones en la mayoría de las ciudades podría elevar la importancia de las políticas de sostenibilidad y climáticas como ejes vertebradores de consensos, programas y pactos conjuntos de gobierno. En este sentido, se ofrecen a continuación una serie de aportaciones que pretenden entroncar estas políticas con aspectos de acción política, legal, socioeconómica o participativa, como parte de ese consenso necesario entre formaciones en el ámbito municipal.



En primer lugar, cualquier consenso debe partir de la necesidad de entender el carácter transversal de las políticas vinculadas al desarrollo sostenible y a la lucha contra el cambio climático, fomentando su integración en todas y cada de las áreas de gobierno así como la colaboración con los diferentes niveles de la administración. Por tanto, la acción climática en los ayuntamientos debe tener un carácter poroso que no solo impregne las áreas más vinculadas, de movilidad, energía, urbanismo, espacios verdes o residuos, etc., sino que debe alcanzar e influir otros ámbitos como los económicos y financieros, culturales o servicios sociales entre otros.

Durante los últimos años, hemos observado como desde una adaptación determinada de la legalidad vigente, se ha procedido a la privatización progresiva de servicios públicos, ya fuera en ámbitos como la sanidad o la educación, pero también en lo concerniente a la gestión del agua. Desde los nuevos gobiernos se debe observar escrupulosamente como han sido estos procesos, paralizando privatizaciones y blindando el agua como un bien público cuya gestión debe estar en mano de la ciudadanía haciendo de que su gestión sea netamente pública, transparente y participativa.

Del mismo modo, esta legalidad adaptada a unos intereses económicos determinados ha supuesto la creación de impuestos desde la Administración que han limitado y son un lastre para el fomento del autoconsumo energético a través de las energías renovables. Son los Ayuntamientos quienes conjuntamente, deben actuar decididamente para superar estas limitaciones, totalmente injustas tanto para la ciudadanía como para el medioambiente, enfrentando estas leyes e impuestos y elevando estas reclamaciones a los órganos correspondientes ya fuera en el ámbito nacional o europeo, a la par que preparan las estructuras urbanas, ya fueran normativas o físicas, para el fomento del autoconsumo energético a través de renovables en edificios públicos y privados.

Es en este contexto desde donde podemos hablar igualmente de sostenibilidad y justicia social y la importancia de vincular la protección del medioambiente y el fomento de medios de vida sostenibles con la protección de las personas y la lucha contra la pobreza y la desigualdad. Luchar contra la pobreza energética, las renovaciones energéticas de edificios, la generalización de las experiencias de agricultura urbana y periurbana, o en general, la difusión de modelos de economía y empleos verdes, nos señalan un camino hacia el que nuestras ciudades se deben dirigir si el objetivo es conseguir una transición social, energética y de medios de producción más sostenibles y una sociedad más justa, equitativa y respetuosa con el medio que la acoge.

Y por último, entendiendo que estos procesos implican en primer lugar el desarrollar un fuerte componente de concienciación, participación y formación. A pesar de la supuesta voluntad por el cambio, nuestros cargos electos, técnicos municipales o la propia ciudadanía en general, carecemos en gran medida de los conocimientos, el nivel de concienciación o los mecanismos participativos necesarios para llevar a cabo los cambios que se requieren si queremos que nuestras ciudades puedan ser reconocidas como ejes en los procesos de transformación urbana mencionados en estas líneas.

Se proponen estos enfoques, político, legal, socioeconómico y, formativo-participativo como puntas de lanza desde donde podemos mejor enmarcar una futura acción climática en los próximos cuatro años para nuestras ciudades, y alcanzar puntos de acuerdo y consenso entre las diferentes formaciones políticas.